miradas

Te estoy mirando, llevo un rato mirándote a los ojos mientras hablo,

Tus ojos me tienen hipnotizado, no puedo mirar a otro lado;

Pero sigo hablando, sin saber lo ke estoy diciendo,

Sin saber de lo ke estoy hablando, sin escucharme.

A veces gesticulo de acuerdo con alguna palabra, alguna entonación,

Ke me aborda mientras bebo de tu iris, para ke tú me escuches

Para ke no dejes de mirarme.

Para ke no se aparten tus pupilas de mi alma,

Y entonces descubro Ke tal vez tu no me escuchas,

Ke, al igual ke yo, tú solo me miras adentro, muy adentro,

Entonces pienso, ¿para ke hablar?

¿Porque no mirarnos en silencio?,

Si de esa manera hablamos mas de lo ke nuestros labios son capaz.

Pero las palabras se escapan de mi boca, se dejan resbalar por entre la

Lengua, como un torrente de agua fresca,

Con alguna intención, tal vez restarle importancia al momento,

Tal vez disimular el enfrascamiento en el ke me encuentro,

Tal vez.

Y cuando el sonido termina, cuando ya no puedo hablar más,

Aparece tan deseado silencio de dos miradas ke hablan;

Durante un segundo, no necesito más tiempo,

Para descansar después con la mirada fija al cielo,

Descansar porque siento ke te he hecho el amor por dentro.